domingo, 18 de octubre de 2009

Postales: Edimburgo II (Míster Sherlock Holmes)


Me diréis, y no sin razón, que Sherlock Holmes tenía su casa en Londres, concretamente en el 221B de Baker Street... pero he aquí que, al tercer día de estar en Edimburgo, y justo detrás de mi hotel, por pura casualidad, me encontré con esta estatua en la calle, (Picardy Place, que le dicen) donde Conan Doyle había nacido... y yo había pasado tres días sin saberlo...
Cualquiera que tenga una mínima relación conmigo sabe que Sherlock Holmes es uno de mis personajes favoritos de la literatura. Incluso, rellenando uno de esos estúpidos (y divertidos) tests en Facebook, lo nombré como 'mi amor imposible' (lo que llevó a algún amigo a reírse de mí, con cariño y eso, pero cachondeito hubo...). Pues sí, para que negarlo, me encanta este hombre tan frío y tan lógico, científico y misógino, como me encanta Spok, qué le voy a hacer, me atraen los tipos sin sentimientos y con sangre verde en las venas... Creo que uno de los momentos más felices de mi vida fue el descubrimiento de una serie de Granada TV, protagonizada por Jeremy Brett, (que Dios tenga en Su Gloria), que sigue, casi fielmente, los relatos detectivescos de Conan Doyle, (que escribió más cosas, de Historia y tal, pero cuya inmortalidad debe a este personaje al que odiaba cordialmente, y al que intentó asesinar, algo que nunca podré perdonarle, ni con la redención de resucitarle para nosotros, sus lectores)
Aparte de la atracción que ejerce sobre mí el personaje, el ver un monumento a alguien que no era un asesino caníbal, en Edimburgo, fue un cambio refrescante. Después de haber tomado el lunch en el edificio en el que Deacon Brodie, (personaje en el que Stevenson se inspiró para dar vida a su Doctor Jeckill), alguacil de día y asaltador de caminos de noche, había vivido; después de fotografiarme a la sombra de la fuente que señala el lugar en el que se ahogaba a las brujas; después de leer esquelas y epitafios en honor de masones ilustres, el encontrar en efigie a un recto servidor de la Ley, un hombre que había dedicado su vida a perseguir el crimen, un héroe, aunque sea de ficción, que representa a los Hijos de la Luz, fue como un hito que me hizo contemplar la sombría capital del norte con otros ojos.
Para mi disfrute total, enfrente del monumento hay un pub, cuya imagen podéis ver más abajo, en el que, a la salud de Sherlock Holmes, nos tomamos una pintas...



(Dedicada mi amigo el Cowboy en paro, con mucho cariño. Marce, no cambies nunca)


5 comentarios:

Cowboy en paro dijo...

muchísimas gracias arquera, me emocionan estas cosas, en serio.No te preocupes, si a mis años no he cambiado ya no creo que lo haga :)

Bettina dijo...

También soy una seguidora de Holmes! fué el "primer cimiento" de posteriores...CSI.!..jejeje...

José Manuel Guerrero C. dijo...

Hey, que se me pasó el otro día sin comentar esta joya que nos has dejado. Yo también amo a Sherlock Holmes. He disfrutado muchísimo leyendo sus aventuras. Creo que voy ha buscar un libro suyo y pasar parte de la tarde. Creo que es el mejor homenaje que podemos hacerle a su recuerdo.
Tengo que conocer Edimburgo, y cuando vaya, da por seguro que me acordaré de ti. Tienes el don de crear ilusión.
Un saludo.

S. Cid dijo...

¡Qué curioso! Oye, Alawen, empieza a recopilar posts y publícate un libro. Esto merece la pena.

Me gusta Sherlock, pero..., lo siento, lo siento, lo siento..., adoro Agatha Christie. ¿Qué habría sido de mí sin ella? ;-)

Y no lo olvides: empieza a recopilar.

Alawen dijo...

Querida S.Cid, me gusta que te guste...
Pues es una idea, voy a ver si rescato algunas impresiones que tengo por ahí, a ponerlas negro sobre blanco y a ver que tal :)

A mí también me gusta Agatha Christie, sobre todo con Miss Marple... :)